Tres generaciones dedicadas a los clavos de herrar
La Metallurgica Rusconi, hoy en su tercera generación, empezo la producción de clavos de herrar en 1923 en Erba (Italia) a 50 kilómetros al norte de Milano, en la sede histórica del centro de la ciudad. La compañía todavía tiene hoy su sede en Erba, en unas instalaciones nuevas con sistemas de producción modernos, en donde la atención tradicional de la artesanía se une a la innovación tecnológica. Era un progreso natural que debía ser actualizado, aunque no existe un artículo industrial tan unido a la tradición como el clavo para herrar.